viernes, 31 de octubre de 2014

LA PATRIA DEL NAUFRAGO

LA PATRIA DEL NAUFRAGO



En régimen  de aislamiento,
de frustración con respecto a la sociedad,
se encuentran los refugiados del tercer mundo.

Salieron de su patria, de la casa del padre, 

en busca de la libertad
y de la independencia económica.

Y llegaron a la patria del náufrago.

Algunos entraron en la puerta 
de la clandestinidad.
Otros en dirección a la puerta del sistema, 
de la burocracia.

Y llegaron a la patria del náufrago, la del exilio

la de la tiranía de la crisis y de las clases sociales,
la de la comisaría, y los antidisturbios.

La patria del náufrago,

donde termina su utopía 
y la negación del héroe y su furor.

Lejos quedó su infancia,

cerca su alienación.

Nany Hurtado 


miércoles, 29 de octubre de 2014

MUJER DE LA NOCHE MUJER CRISTAL

MUJER DE LA NOCHE
MUJER CRISTAL



Atrapada en la oscuridad
llora por su vida de desencuentros.

Atrapada en la negrura del espacio
entre nudos galácticos 
llora por su desnudez
llora por su desventura.

Desea aterrizar
¡desea llegar a su mundo perdido!
pero no lo encuentra.

Cuando cree que va a llegar
se volatiza en mil pedazos 
y tiene que volver a comenzar.

Asteroides escurridizos del espacio,
caen sobre ella y la desmoronan.
perdió su escudo, perdió su atmósfera.
Y ahora está colgada de la negrura.

Su mundo quedó hecho pedazos
y no lo sabe recomponer.

Gira y gira, como si alguien la lanzara
una y otra vez y cae en redes
una y otra vez, mujer de cristal.

Ella decidió ser luna, 
y la luna la atrapó.

La atrapó y la lanzó
y ahora vaga por la oscuridad
mujer de la noche, mujer cristal.

Nany Hurtado


MUJER DE LA NOCHE - (c) - Nany Hurtado

miércoles, 22 de octubre de 2014

EL ÁRBOL CAUTIVO

EL ÁRBOL CAUTIVO


Había un árbol robusto en medio de la plaza de un pueblo, un  néctar  caía fluidamente por su tronco, su apariencia era algo grotesca, pero sus frutos eran tremendamente apetecibles, todo el pueblo iba en busca de él, deseosos los ciudadanos de tener entre sus bocas ese mordisco tan dulce al paladar y sin embargo tan amargo cuando llegaba a sus entrañas.

Todo sucedía en un instante, quedaban bloqueados con la mirada fija en el ancho tronco,  viendo sus propias vidas, pasado, presente y  futuro proyectadas apresuradamente en sucesivas imágenes....  a todos les  aterraban se ponían de rodillas implorando perdón, eso traía  consuelo al corazón  pero al volver cada uno sobre sus propios pasos volvían a ser iguales, repitiendo sus mismas conductas como si quisieran olvidar todo lo que habían comprendido...

Cuando el peso de sus culpas les impedían ser felices, volvían a la plaza y allí estaba otra vez el árbol invitándolos de nuevo a probar sus frutos y otra vez las mismas escenas y caían de rodillas e imploraban misericordia, y otra vez todo volvía de nuevo a ser lo  mismo.

 Un día el árbol tomo su forma humana y fue al rey y le grito todo lo que había descubierto de  su reino por medio de cada imagen reflejada en su tronco, y con un gesto brusco tiro el báculo que llevaba y alzando los brazos, grito en alta voz, todas las desgracias que estaban previstas que iban a ocurrir a él y  a todo su reino.

El rey monto en cólera y le dijo en tono amenazante que su insolencia, había sido exasperadamente atrevida  y mando que lo apresaran y lo encerraran en un pozo medio cubierto de aguas nauseabundas.
Allí estuvo cautivo por causa de su integridad moral, se sentía como un búho solitario en medio de la noche, aprendiendo a ver en la oscuridad,  teniendo todo el tiempo del mundo, para levantar sus plegarias... 

El tiempo transcurrió, el soberano fue tomado preso y su reino llevado al cautiverio.

Pasado el tiempo, un día pudo ver un haz de luz por encima de su cabeza y luego una cuerda y una voz que le invitaba a salir. Sus plegarias fueron escuchadas, rápidamente se agarró fuertemente a ella, en un instante fue izado y sus pies pudieron tocar la tierra, el tiempo de oscuridad, había terminado. Sus ojos entornados , no estaban acostumbrado a tanta claridad y  deseaba con todas sus fuerzas que se hiciera de nuevo la noche... y ella llegó con su luna, para amortiguar tanto dolor en el corazón del profeta.

Los días sucedían tumbado en la tierra, relajado esperando que sus raíces de nuevo se desarrollaran, alejadas de la plaza y de la ciudad, en busca  solo de aguas limpias donde poder nutrirse.
Y mientras la luna se acostaba y el sol se levantaba poco a poco salieron sus brotes, sus hojas y sus ramas y en una primavera sin apenas darse cuenta de nuevo estaba dando sus frutos, unos frutos brillantes y saludables para todos los que tímidamente se acercaban para probarlos.

Nany Hurtado

EL ARBOL CAUTIVO - (c) - Nany Hurtado

viernes, 17 de octubre de 2014

TRAMPAS Y REDES

TRAMPAS Y REDES

Ciegos que ven
Sordos que oyen

La luna en el día
el sol en la noche.

Ladrones en el poder
pastores como títeres 

Razones que son sin razones
locos que llevan la cordura.

Todo está al revés
circunloquios pegadizos 
repetidos una y otra vez
para decir siempre lo mismo
para drogar a las masas dormidas.

Lo que es la derecha, está a la izquierda.
Lo que es la izquierda está a la derecha.

Y todos mirando su ombligo 
como el centro del universo.

Marionetas de un mundo que se tambalea
¡Que grita con fuerza! buscando quien se levante.
Y mientras... la esperanza expectante 
de los olvidados... de los pobres de este mundo, 
que con sus alas dormidas,
está esperando las partículas mágicas
que le ayuden a volar.

Entre los rayos tibios 
de un sol que está por alumbrar

miércoles, 15 de octubre de 2014

REFLEJO DE LUNA EN LA CASCADA

REFLEJO DE LUNA EN LA CASCADA

"Un abismo llama a otro a la voz de tus cascadas.
Todas tus olas y tus ondas han pasado sobre mí"
Salmo 42: 7



El sol acababa de ocultarse,
y a luna tímidamente hizo su aparición. 
En esos instantes entre las malezas, 
salió una bella muchacha,
siempre esperaba esos momentos, 
para hacer su baño de renovación.

El día transcurrió  largo y caluroso,
las venas parecieran hervir dentro del cuerpo
y allí estaba esa agua cálida y con burbujas, 
a causa de la leve cascada que corría entre las rocas.
El terreno había hecho una balsa natural 
y en aquél lugar del río el agua era aún más fresca.

Siempre hacía lo mismo, andaba unos pasos...
daba vueltas en torno a las rocas
 que se encontraba a su alrededor,
como queriendo reconocer el terreno, 
agradecida por ese lugar bello y enigmático
que en la noche le esperaba.

Era su santuario natural, cada día pareciera igual,
pero a la vez distinto, el rumor de las aguas le traía 
nuevas impresiones y sensaciones.
Unas veces hablaba a sus sentidos,
otras a su ego más profundo,
otras a sus deseos y anhelos, 
otras a su próximo futuro...

Cuando con sus manos terminaba de acariciar cada roca,
insuflaba el aire por su pecho desnudo
y ¡dando un salto! plácidamente se sumergía.

En esos momentos era un cuerpo con ella... y...
 respetuosamente... con los ojos cerrados se deslizaba,
dejando que el agua de la cascada rozara su cuerpo,
como si ella pudiera arrancarle, ¡todo! lo negativo,
¡todo! agobio o preocupación.

Salía para retomar el aire,
y volvía de nuevo a deslizarse 
entre el burbujeo de sus aguas.

Cuando terminaba su ritual,
la luna estaba en su máximo apogeo
y allí... serena... en calma,
esperaba a que el rayo de luna llegara a la balsa.

Esos minutos eran mágicos, 
el agua se tornaba de plata y lentejuelas
y toda ella se extasiaba ante ¡tanta belleza!

 La cascada bajaba su sonido,
solo se escuchaba un leve rumor...
de sus ondas salían palabras cantarinas
y con cada golpe de agua la palabra se recalcaba,
pero con matices diferentes,
como ligeras insinuaciones dirigidas hacia ella
y así agradecida cada noche
volvía de nuevo a su entorno
tranquila meditando en el secreto 
que aquella noche se le había revelado,

Nany Hurtado



REFLEJO DE LUNA EN LA CASCADA - (c) - Nany Hurtado